En qué consiste la combustión y algunos ejemplos

Conocemos como combustión a las reacciones químicas que generan calor, conocidas como exotérmicas. En las reacciones de este tipo podemos identificar dos factores principales: el comburente, que es la sustancia o elemento que propicia la reacción, y el combustible, que es la sustancia que se consume en la reacción.

Fases y tipos de combustión

Las combustiones se componen de una rápida sucesión de breves y simultáneas reacciones, que componen tres fases:

- Etapa de pre reacción: en la que los hidrocarburos del combustible se descomponen y reaccionan con el oxígeno, formando radicales, muy inestables a nivel molecular. 

- Etapa de oxidación: es la etapa en la que se genera la mayor energía en forma de calor, en el momento en que el oxígeno entra en reacción con los radicales, desplazándose los electrones.

- Última etapa: se produce el fin de la oxidación y se forman las moléculas de los gases liberados al final de la reacción.

Los tipos de esta reacción que existen son tres, básicamente:

- Reacción completa: aquellas en las que los combustibles se oxidan por completo, con compuestos oxigenados como subproductos.

- Reacción neutra: estas son las reacciones completas ideales, para las que se emplean las cantidades justas de aire para que se produzcan. Se da normalmente en ambientes controlados.

- Reacciones incompletas: aparecen los compuestos medio oxidados en gases de la reacción, como pueden ser el monóxido de carbono o el hidrógeno.

Algunos ejemplos de estas combustiones pueden ser:

- Una fogata: la materia orgánica, leña, hojas secas o papel, se amontona para concentrar y mantener la reacción.

- Una cerilla: un palito de madera con cabeza de fósforo, que por fricción se puede calentar para generar una reacción que da paso a la llama.

- Fuego fatuo: en la antigüedad se asociaban a espíritus, pero son propios de ciénagas y pantanos, donde se generan gases hidrocarburos susceptibles de arder.

Estos son algunos variados ejemplos de combustión, reacción muy común.